Zumo refrescante
Los zumos nos aportan, gran cantidad de vitaminas y minerales que alcalinizan nuestro cuerpo, mejoran nuestra piel y nos hacen sentir más jóvenes de forma natural, ya que fortalecen nuestro sistema de defensas y evitan enfermedades.
Tienen efecto depurativo, oxigenan nuestra sangre y regulan nuestro tránsito intestinal.
Vivimos en un mundo que va a un ritmo muy acelerado, con mucho movimiento y estrés.
Es necesario volver a retomar nuestras vidas, con un caminar más lento, reservando momentos a lo largo del día, no solo de expansión hacia fuera, sino también de concentración y calma, en los que podamos parar un instante para recapacitar y comprender lo importante que es cuidar nuestro cuerpo, mimarlo, poder escuchar sus necesidades y atenderlo con mimo y cuidados específicos.
Tomarnos un tiempo diario para elaborar un delicioso zumo, es la mejor manera de aportarle energía, vitalidad, alegría, y bienestar.
Elaboración de zumos
Es importante que los zumos naturales sean elaborados con ingredientes ecológicos, de esta manera evitaremos la ingesta de pesticidas y contaminantes que las frutas no orgánicas suelen llevar.
Los zumos se pueden elaborar en una batidora con algo de agua, aunque lo más apropiado sería elaborarlos en una licuadora o en una masticadora.
En la masticadora, se conservan todas las propiedades de las frutas o verduras ya que conservan un 40% más de vitaminas que las licuadoras comunes de alimentos, prensan la fruta y los motores, poco potentes y con bajo movimiento, hacen que se conserven los nutrientes por más tiempo.
Antes de trocear las frutas o verduras para introducirlas en la máquina elegida, es necesario limpiarlas con agua, si es filtrada mucho mejor, ya que evitaremos el cloro y los metales pesados del agua del grifo.
Primera semana del mes
Medio pepino pelado, una rodaja de piña a la que quitaremos el centro (la parte dura), un trozo pequeño de raíz de jengibre y dos ramas de perejil.
Piña: Es antidiarreica, depurativa, antiinflamatoria y anticatarral.
Raíz de jengibre: Es un potente antiinflamatorio, cura el resfriado, la inflamación de garganta, la gripe y aumenta el sistema de defensas del organismo.
Perejil: Favorece la digestión y es fuente de vitamina C.
Segunda semana del mes
Manzana y apio con hojas.
Apio: Aporta agua, sales minerales, vitaminas A, C y E, y es rico en calcio, magnesio y zinc.
Tercera semana del mes
Leche de coco, aguacate, espinacas y melocotón.
Aguacate: Rico en magnesio y potasio, fortalece el sistema inmunológico y aporta vitamina A y C.
Espinacas: Aportan energía y combaten las alergias, reducen los problemas de visión y aumentan las defensas del organismo.
Melocotón: Tiene un alto contenido en agua y elevados niveles de potasio, es rico en minerales como el magnesio, el fósforo, el zinc, o el selenio, también es rico en vitaminas A y C.
Cuarta semana del mes
Moras, fresas y uvas.
Fresas: Refuerzan los huesos, aumentan las defensas, son antiinflamatorias, depurativas y diuréticas y regulan el tránsito intestinal.
Uvas: Son ricas en vitaminas A, C y K, alivian el estreñimiento, son antiinflamatorias y antioxidantes.